martes, mayo 17, 2005

De una tarde construyendo puentes y recordando raíces musicales...


Redemption Songs..
Originally uploaded by Jarsito.

El atardecer meridano del día de ayer, era increíble. Los rayos del sol pintaban a la ciudad de color naranja. Una brisa venía del norte, refrescando a todos aquellos que habitamos este rincón del sureste mexicano. El escenario, estimados seven readers, era perfecto. Ideal para adentrarse en un nuevo cd. Tener uno es lo máximo que me puede pasar. Me encanta abrirlo, sentir el olor a nuevo del cuadernillo, leerlo por completo y disfrutar de la música mientras lo hago. Es aún más emocionante cuando se trata de un nuevo cd de algún artista al que he admirado por mucho tiempo. Jars of Clay es una de esas bandas cuya música me ha tocado de manera particular. La manera tan sencilla que tienen de expresar cuestiones de fe, de lucha, de la vida misma, Siempre trazando bellas avenidas de esperanza y dibujando líneas musicales llenas de exiquisitez y calidad, es simplemente impresionante.

Un nuevo disco de Jars, resulta pues, en algo que anticipo con mucha emoción. Abrirlo significa reeencontrarse con viejos amigos. Amigos que tienen la particularidad de llegarte a las fibras más profundas del ser con esa maravilla llamada música. Jars of Clay celebra este año el décimo aniversario de la edición de su primer disco compacto. Que lejos están aquellos días en los que Flood se convirtió en una de las mejores canciones de aquel 1995. Después de Varios millones de discos vendidos y con algunos Grammys bajo el brazo, uno esperaría que la banda tomara una dirección profundamente vanguardista, en donde el extraordinario talento lírico de sus integrantes (Jars más que hacer canciones, hace poesía) y la capacidad musical de los mismos se manifestara en direcciones innovadoras como lo han venido haciendo desde que iniciaron como agrupación. Redemption songs no defrauda en ese sentido. Pero es un disco que va más allá de ello. Es un trabajo atrevido e introspectivo, que se siente hecho por el placer de hacer música y por reconocer raíces musicales profundamente arraigadas en la banda y en la cultura popular norteamericana en particular y en la occidental en general.

Escuchar el Redemption songs, es hacer un recorrido por 13 tracks en los que el candor del Gospel está siempre presente. Se trata de 13 canciones tradicionales del género a las que Jars of Clay ha inyectado nueva vida. Un disco que comienza con una cacarjada a la que le siguen dos notas del piano, luego una guitarra en Slide y un suave acorde de guitarra acústica, que son acompañados de una delicada sección ritimica. Esa será la tónica primigenia del disco: un minimalismo musical decorado con líneas líricas de esperanza, felicidad y fe. Líneas que de pronto son adornadas con los sonidos del cello, el banjo, el violín, la ármonica o un par de notas del piano y del Hammond B3, que con suaves pinceladas le van dando textura y contenido a los temas.

No es importante si uno cree o no en lo que se dice en las canciones, pues independientemnte de ello se tiene que reconocer inmediatamente la pasión con la que fueron escritas y con la que son interpretadas. Esto es notorio en la gran "i'll Fly Away" (...some bright morning, when this life is over i'll fly away...) en la que la voz de Dan Hasseltine (vocalista del grupo) es acompañada por la tradicional voz gospel de Sarah Kelly. Mismo resultado que provocan dos tracks en los que interviene la leyenda gospel conocida como The Blind boys of Alabama (Nothing but the Blood y On Jordan's Stormy Bank i Stand) en los que las armonías vocales alcanzan niveles de excelencia y en donde la tradición gospel se funde con el rock, el pop y la música clásica de manera extraordinaria.

Me gusta creer que durante toda nuestra vida vamos edificando puentes. Al posarnos sobre ellos, miramos las valles y las montañas que vamos uniendo con nuestras nuevas construcciones. Nos sentimos entonces en un lugar único, especial y en el que hemos estado siempre de alguna manera presentes. Redemptions Songs es un puente en el trabajo de Jars of Clay, escuchándolo se matiene la sensación de estar en un punto de unión entre el pasado y el presente. Es una colección de viejas palabras (algunos temas datan de los años 20) a las que se las ha puesto nueva y moderna música. Música que reconoce la riqueza del pasado, de la historia y que de alguna manera articula el mensaje y el lenguaje de la misma para que sean comprendidos por la juventud posmoderna del siglo XXI.

It is well with my soul, cantaba Jars of Clay. Al término del disco, compartía esa sensación. Mi alma estaba en paz, pero al mismo tiempo, la razón estaba feliz de poder apreciar la música en todas sus dimensiones. Cerré el librillo del disco, mientras la noche meridana comenzaba a presentarse. Había sido un encuentro íntimo con las notas y con la capacidad humana de ir creando arte a través de ellas. Y mientras la brisa iba menguando, una sensación de tranquilidad llegaba con la noche y en mi cabeza resonaban las útimas notas del disco (...unveil Thy Beauties to my sight i might love Thee more // Oh that i might love Thee more // Thy Glory o'er creation shines yet in Thy Sacred word // 'Tis here whene'er my comforts droops and sin and sorrows rise // Thy Love with Cheering beams of hope my fainting heart supplies //And ah too soon the pleasing scene is clouded over with pain // My Gloomy fears rise dark between and i again complain // oh and i again complain....) ...

...La noche, seven readers, ya había revelado su bellezas. Fui Feliz...


4 comentarios:

Anónimo dijo...

maldito amigo!!!!! me tuve que enterar por Héctor que tienes un blog!!!! picture me offended...
Clau

Anónimo dijo...

y pensándolo mejor, que me podía esperar??? after all...it´s just a bird!!!! .P
Clau

Anónimo dijo...

Maldito gordo!!!!!!
gracias por avisar...se feliz..nunca cambies.

Emma

David Moreno dijo...

JAAAAAAA...mirad, les había dicho desde antes que tengo un blog...saludos y abrazos a ambas :)