viernes, abril 02, 2010

De Judas...

...Sin embargo, de pronto y para sorpresa de todos, arqueó la espalda con violencia, tensándola contra los clavos, arrojó la cabeza hacía atrás y gritó:
-Dios mío, Dios mío, ¿porqué me has abandonado?.
Le salió de las entrañas, aquel grito de protesta, las últimas palabras pronunciadas por aquella extraordinaria voz que aún oigo en mis recuerdos y en mis sueños. Por eso sé que Dios no existe. De haber existido, y de haber ordenado semejante fin para Su fiel hijo y sirviente, en aquel momento habría muerto de vergüenza. O quizá si que existía un Dios, y en efecto, se murió en aquel instante, y lo que queda de él no es más que un recuerdo, un rumor, una huella borrosa de lo que un día fue, propagada por los Ptolomeos y los Pablos (otro integrante de la secta de Jesús que nos viene a ver de cuando en cuando) que han sido y serán, mercanchifles de lo sobrenatural, lo divino, lo eterno, lo extinto.
Judas
(en Mi Nombre fue Judas, de C.K. Stead)

Seven Readers!!...

En estos días en los que los nombres de Jesús y Judas suelen ser mencionados por todas partes, quizá valga la pena que se acerquen a una muy interesante novela en la que la vida de ambos personajes es revisada desde el punto de vista del "traidor" más grande de "todos los tiempos" (de acuerdo a la teología cristiana), es decir desde la óptica de Judas Iscariote. Se trata de Mi nombre fue Judas, escrita por el escritor neozelandés C.K. Stead, quien hace una minuciosa revisión de la relación de Judas y Jesús, tomando como base al famoso "Evangelio de Judas" que tanto ruido hizo en los medios de comunicación hace algunos años.
Stead presenta a Judas y a Jesús como amigos de la infancia y que van desarrollando con los años una intensa y profunda relación de amistad, sellando un destino que parecía unirlos de manera invariable a pesar de sus orígenes distintos: Jesús es el hijo mayor de una familia numerosa y pobre, Judas es el hijo único de un comerciante acaudalado. Ambos asisten con el mismo tutor quien reconoce en los dos habilidades especiales:Jesús es un líder nato, Judas es un personaje con grandes habilidades para la filosofía. Y es precisamente esta habilidad lo que hace de Judas a un escéptico, alguien que si bien se deja seducir por la personalidad de su amigo, al grado de convertirse en uno de sus seguidores, se convierte también en quien más le cuestiona su proceder y los actos que de éste se derivan.




La novela está situada en un contexto singular: El de la Galilea del Siglo I. Un lugar en el que la opresión y el terror provocados por el invasor romano, ha generado a una población crédula y dispuesta a escuchar a todo aquel líder que sugiera cierta posibilidad de revelarse en contra del poder de Roma. Por eso, cuando Jesús aparece, inmediatamente gana adeptos que comienzan a verlo con ojos de esperanza, comienzan a atribuirle milagros y comienzan a dibujarlo como el Hijo de Dios, al grado que terminan por convencer al hijo del carpintero que es él realmente el Mesías que Israel y el mundo espera.
La gran aportación de Stead yace en presentar a Judas como un personaje que no se deja llevar por el caudal de admiración y fanatismo que comienza a rodear a Jesús. Por el contrario, el amor que siente por su amigo de la infancia, obliga a Judas a cuestionarlo, a usar el pensamiento crítico para confrontar al brillante Jesús con la realidad que le rodea. Quedan así al descubierto la nula capacidad del nazareno para hacer milagros (estos en realidad son inventados por el rumor y el deseo de creer de la plebe) pero al mismo tiempo una personalidad arrolladora, contradictoria y que se mueve al borde de la locura y la razón.
Es una novela narrada con gran habilidad y escrita en un lenguaje sencillo, cuyo protagonista mira hacía los hechos del pasado (Judas tiene 70 años y vive tranquilamente en Grecia) con la sabiduría acumulada por los años y con las armas que a la razón le proporcionan el estudio y la práctica del escepticismo. Los dos personajes principales serán espejo uno de otro, serán los puntos extremos de un drama cuyas consecuencias tendrán un impacto en el mundo entero, son la representación de la fe ciega y de la razón que busca ante todo el conocimiento de la verdad.
Una novela que os recomiendo leer, especialmente en estos días en los que uno puede ver como la razón es destrozada por una fe completa y totalmente ciega.

Así las cosas hoy viernes...

Salud pues.......

1 comentario:

*SKY* dijo...

Realmente suena muy interesante. Precisamente me han prestado uno que, me parece, es de este estilo y que quizas ya conozcas, se llama El Evangelio Según Jesucristo, de Jose Saramago. Aun no lo comienzo pero suena igual de interesante, así que inmediatamente después de leerlo seguro que continuo con tu recomendación.

¡Saludos y un beso enorme!